ANTE TODO, AGRADECEMOS SU INTERÉS POR ESTE CASO.

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DATOS CONTRASTADOS EN REFERENCIA A LA DESAPARICIÓN DE DOÑA NEMESIA MORATÓ



Sabemos que el lunes 14 de febrero de 2004 abandona el hogar del jubilado con la intención, según ella (como comunicó a sus compañeros del ala de juegos de mesa del citado asilo) de reincorporarse como trabajadora voluntaria en la Hemeroteca Nacional en su sede de Barcelona.
Paseo de la Zona Franca s/n. esquina C/ Hornos del Berguedà.

Así mismo, tenemos constancia de que se muda de domicilio y pasa de residir en la calle Brunete 25 (en una casa con patio del barrio del Carmelo), a hacerlo en Hospitalet, en un bloque de protección oficial de la calle Celestino Huertas 24. Al parecer, se hace traslado de un escueto ajuar (ropas y muebles, sobre todo) y el resto de sus pertenencias son donadas, según consta en un albarán de Corredurías Olmo, a los Hogares de la tercera edad de S'Agaró. Como hemos comprobado, la mayoría de los objetos llevan más de dos años embalados en cajas de cartón en el salón principal del pequeño apartamento, a excepción de un bañador C&K y un vestido azul de noche que comparten percha en el mismo ropero. No se registra actividad ni en la cocina ni en el cuarto de aseo, a excepción de dos botes vacíos de CUCAL, uno en cada espacio. Nadie de la escalera de vecinos ha reconocido la presencia de la sra Nemesia en el inmueble, aunque en el padrón municipal consta como inquilina desde febrero de 1998.
De sus cuentas corrientes y libretas de ahorro son retirados periódicamente los abonos que realiza la Seguridad social en concepto de Pensión de jubilación y Pensión de viudedad desde diferentes capitales españolas. También son puestas al día otras cuentas donde revierten los réditos de algunas acciones. En una de estas cuentas, perteneciente a la Caja de Pensiones de Trujillo, consta el cobro de dos alquileres en Plasencia (Cáceres) y una anotación, también periódica y mensual, de novecientos euros, que se realiza aleatoriamente desde diferentes oficinas de Correos en la provincia de Valladolid por ingresos en efectivo. De estas últimas cuentas no es retirada cantidad alguna, aunque se ha comprobado que se efectúa control del saldo a diario, en alguna ocasión varias veces al día y desde lugares tan dispares como El Cairo, Nuanchot, Tolousse o Reus. Se puede facilitar estadillo completo de esas comprobaciones, algunas con fecha, e incluso hora local, desde enero de 2007 a quien pudiera necesitar tales referencias. No disponemos de mayor información relacionada, aún cuando hemos volcado en estas páginas algunas reseñas sobre su persona que amablemente han ido facilitándonos amigos y conocidos de Nemesia. En estos momentos estamos a la espera de más informaciones al respecto. Aceptamos cualquier anotación sobre el particular de aquel o aquellos que tengan a bien ofrecernos de su paradero, tal vez alguna pista fiable u otras referencias acerca de su vida. Quizás estas puedan conducirnos de alguna manera hasta ella. Agradeceremos se pongan en contacto con el gabinete de consultoría Rideel&CO o con su director Atahualpa Figo Moreno a través de este medio.







10.07.2008

NUEVO PARTE MÉDICO. (copia) Zoroastra Perarnau. Zori. (Desde un lugar de la Patagonia)

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Badalona viernes 3 de Octubre de 2008


A la atención del Doctor Don Lucio Anneo Lamela Smith
Responsable y tutor de Don Atahualpa Figo Moreno.

Nuevo parte médico que, según se nos ha demandado, completa la segunda semana de externalización en el tratamiento de nuestro paciente.
Insistimos en que tras la intervención nada ha vuelto a ser igual en la vida disoluta del señor Atahualpa, aunque eso ya se haya comentado con anterioridad.
Hoy se ha levantado temprano -nos ha dicho- y antes de salir de casa, tras la ducha el escueto café y las tostadas (hoy tampoco se ha afeitado) ha comprobado la cicatriz en la frente y con mucho cuidado ha vuelto a taparla. No haría falta, lo sabe, pues ha sanado de forma aceptable, y a pesar de tener ese aspecto, el aspecto, siente un extraño pudor e insiste en mantenerla, según él, fuera de la vista del común del populacho
Atahualpa siempre ha sido un hombre sistémico- afirma hoy- aunque faltaría verlo en su oficina y comprobar su escritorio, u observar sus cajones impolutos, o vacíos- como él mismo también dice- o sus armarios de cocina, o su caja fuerte. Desde finales del verano, y tras la intervención, vive solo y centra sus tareas de tiempo libre (ya no trabaja por la tarde) en ordenar su vida ordenando sus pertenencias: Papeles que no encuentra, informes que no existen, casos que en su otra vida llenaron sus horas y sus bolsillos y ese largo etcétera en el que insiste e insiste y del que lamenta no poder aportar pruebas
Hasta la operación, nunca había notado nada, también se informó en su momento.
Como indica, duerme razonablemente bien, sobre todo desde que ha abandonado esos vicios que tanto pesar le han acarreado, entendiéndose como bien las ocho horas reglamentarias, no haciendo nada contradictorio en ese tiempo de descanso al margen de levantarse alguna noche y orinar sentado para no salpicar el inodoro. (Deberemos examinarle la próstata). Ha sido al poco de regresar del sanatorio, pues ha parecido absurdo prolongar por más tiempo su convalecencia, cuando ha empezado a percibir esa tensión intracraneal y esas visiones, propias, como ha comentado nuevamente, de un estado hipnótico fruto, a su vez, del tipo de intervención a la que se le ha sometido.
Mientras la inflamación ha ido yendo a mejor y ha remitido, la pequeña cicatriz resultante ha comenzado a manifestar lo que a él tanto parece preocuparle. Lo cierto es que al ver esa pequeña protuberancia, cosa que no se logró evitar en su momento y no pudiendo suturar por cuarta vez el surco en que se ha convertido la cisura, la visión de esa marca lamentable nos recuerda a todas luces un ojo.
Sufre el señor Atahualpa, todo hay que decirlo, una serie de sintomatologías propia de los seres inocentes, limítrofes, de aquellos que acuden a la pregunta -Doctor: ¿Qué tengo?- con la levedad o la inconsciencia de que la cosa no va conmigo, o creía que eso no iba a sucederme a mí. En sus últimos sueños y vigilias, o al menos así lo asegura (creemos que esto será lo más sobresaliente de entre todo lo que se nos ha preguntado), Atahualpa se enfrenta con docenas picahielos puntiagudos y sanguinolentos que flotan amenazantes sobre bandejas cromadas de laboratorio, huyendo él a continuación y en camisón, por cornisas oxidadas de factorías novecentistas del Bajo Llobregat, donde renacen, también según él mismo, centenares de crisalidas cristalinas reconvertidas en obreros en paro, trileros, trapicheros o palmeros de rumba.Mientras, paralelamente, dice recibir estímulos inconcretos tras corrientes extrañas que fluyen por su cabeza, a la vez que afirma que el aspecto de la incisión, el aspecto, va cambiando sin motivo aparente y al tun tún, sin lograr comprender exactamente qué pasa.
Tras el último examen, la incisión (láser) parece haber sanado con total normalidad al margen de un leve entumecimiento y un pequeño edema que persiste en la parte inferior, manifestando de algún modo una cierta semejanza a un ojo entreabierto, de párpado irónico o burlón, o de pasma fullero o maldormido.
Los doctores Sirgón y Güiber, del Centro Neurológico de la ciudad de Badalona creen, por lo menos así nos lo apuntan, que el ex detective Atahualpa merece pasar de nuevo por el quirófano para desmembrarle aún más los lóbulos frontales, no siendo cosa baladí, antes al contrario, pues ese ojo puede ser, según los doctores, un brote espontáneo de su espíritu indomable e insojuzgable, y aunque resulta del todo incierto el resultado de la siguiente intervención, la promueven con el argumento de que quizás Atahualpa nos esté tomando el pelo.No obstante, el ex detective privado insiste con vehemencia en que con ese nuevo ojo percibe con claridad cosas que antes no podía, ni quería, y trata de demostrárnoslo con referencias a nuestro futuro, o al de la humanidad misma, pues pretende haber establecido contacto con las fuerzas telúricas, que dice él, a la vez que con la energía absoluta, la del universo (sic) que es lo que en definitiva las gobierna.
-Ahora le ven cerrado- nos ha dicho- pero es de noche cuando se despierta.-
No disponiendo de otras novedades al respecto de su salud , y posponiendo hasta la siguiente visita el nuevo parte médico, quedo a la disposición de usted para lo que guste consultar.
Doctora Susana Górriz
Club Frenopático y cultural.
Hospital Ruiz de Lopera. Badalona.

8 comentarios:

Alfonso Muñoz dijo...

Apreciada y desapercibida Zori.
No teniendo constancia de su conocimiento en cuanto a mi persona, le ruego me beneficie indulgencias si peco de indiscreto al interesarme por la salud de mi mentor el señor Atahualpa Figo.
Para abreviar puede llamarme Cóndor.

Desolado me encuentro al recibir estas indirectas noticias que no hacen mas que avivar el fuego de mi remordimiento. Abandoné al señor Figo en un trance que temo ha desembocado en este estado lamentable de su salud,luego soy responsable de las actuales circunstancias.
Querida Zori ¿que ha ocurrido durante mi ausencia? ¿qué peligros, que inquietantes vicisitudes han concurrido para que estén las cosas como están?
Por favor, le ruego me informe y sobre todo,me indique la dirección que debo tomar para remediar en la medida de mis posibilidades tanto descontrol.
Suyo y afectadísmo, Cóndor.

rideel dijo...

Distinguido señor Cóndor.

Le sorprenderá el tono que voy a utilizar para desnudarme y darme a conocer a mí misma y darle a su vez a usted referencia de parte de lo que se me ha encomendado y que no he podido referir a persona de confianza hasta el día de hoy. Espero que sea usted el verdadero Cóndor, del que tanto me habló mi jefe algunas tardes mientras permanecía retenido en el centro psiquiatrico y atado a un camastro de hierro, sitios a los que le condujeron irremisiblemente sus artimañas y sus estrategias más rebuscadas.
(ya verá más adelante por qué lo digo)

Le voy a dar referencia de mi persona. Mi gracia es Zoroastra Perarnau Gil, auxiliar administrativa y peluquera en los tiempos libres, de los que ahora tengo en cantidad, y aficionada a la poesía patafísica y a la investigación privada. No le diré nada más de mí por ahora aunque le haré algún comentario acerca de lo mucho que me ha costado rehacer mi vida en este frío continente y encontrar un ordenador (computadora dicen aquí) con conexión Internet, después de dejar Barcelona a principios de mayo, dónde trabajaba, como usted mismo creo que conoce, en el despacho de mi añorado jefe, el investigador privado o detective, señor Atahualpa Figo Moreno del que ya he hecho referencia, alias Rideel y alias Ata el butronero, y alias el Mudo, el Piernas, el Matahambre, Sancocho, Negrito Jeremías… entre otros.

Verá señor Cóndor. Me veo en la obligación de realizarle a usted algunas confidencias, sin ánimo de criticar o referir, necesarias para que usted sepa que ha ocurrido en este tiempo desgraciado, tan lleno de peligros y sinsabores.

Como usted bien sabe, nuestro gabinete de investigación estaba centrado en la desaparición de la insigne escritora y ufóloga Nemesia María Morató Xirgu, anciana de ochenta y siete años residente en Hospitalet, nuestra ciudad, desde mediados del año 2004
En un principio éste se trató de un caso más, asunto que compartía pupitre con algún que otro: seguimientos a maridos farreros, a empresarios jugadores, espionaje industrial, fondos reservados del ejército, joyería monárquica, asesinatos múltiples… Nada de importancia.
Fue quizás debido a los primeros y abundantes y abundosos cheques que fueron enviando desde S’Agaró y a que la investigación que se nos propuso no resultaba ni conflictiva ni cosa arriesgada, ni nada, que el gabinete se centró en exclusiva en las pesquisas convergentes del caso: Nemesia esa Desconocida, prolongando peligrosamente, eso ya se lo dije yo a mi jefe en más de una ocasión, las situaciones para que los cheques fueran llegando puntualmente a principios o a finales de mes.

Atahualpa, el bueno de mi jefe, fue estirando el tema hasta más no poder, y es por ello por lo que fue viendose asediado a todas horas y a todo tipo de cuestionarios y boletines por el insistente asesor de la familia Van-Gaal Morató: Doctor Lucio Anneo Lamela Smith.
Lo cierto es que el mismo Atahualpa podría darle cientos de referencias de todo ello, pero de momento no puede, ya que, como habrá podio observar por el parte médico que he publicado desde Argentina (tengo un bendito contacto en BCN del que ya le daré referencias en cuanto pueda) su salud se ha visto resquebrajada por una dolencia que le ha llevado a una clínica y a la vez a una intervención y después a un sanatorio de convalecencia, aunque luego a un club de recuperación mental.

Por otra parte, le diré que no ha sido fácil desplazarme hasta esta perdida provincia patagónica, no crea, máxime cuando lo he hecho huyendo, como me indicó mi jefe antes de entrar en el quirófano, haciéndolo a toda prisa (lo de salir por patas) y con la sana intención de preservar mi existencia y su tenaz escudriñamiento (el suyo) como él lo definía, sobre el tema de los Van-Gaal y la desaparición de la anciana señora Morató.
Mi vida corría peligro, insistió, que te pires, sal de najas, esfúmate Zori, que estos te pelan, dándome a continuación las contraseñas de su Blog y las de sus correos electrónicos para que fuera yo quien siguiera en el caso y lo coordinara de la manera que mejor supiera. No sé, a veces una no está para según que cosas, pero en aquella ocasión lo vi todo transparente y claro cuando me hizo jurar que me abriera al quinto pino (yo preferí la Patagonia) y que contactara con usted en breve plazo, cosa no he hecho hasta que usted ha dado señales de vida, ya que esa fue otra de sus premisas.

También, mientras le iban contando de forma decreciente del uno al diez justo antes de que la anestesia hiciera su efecto, me traspasó algunos de sus dilemas que ahora traspaso a usted para que haga con ellos lo que considere.

-¿Ha sido Nemesia asesinada por alguien cercano a su núcleo familiar? Me dijo cuando iban por el ocho.
-¿Es esta doctora Górriz la amiga de Nemesia? En el siete.
-¿Tiene el doc Anneo la llave? Dijo en el seis.
-¿Han “mandao” el último xec, Sssoroastra? (siempre me llamaba Zori) En el cuatro.
-¿Dónde están mis calzoncillos? En el tres.
-¿Nos queda Vodka? En el dos.
-Zrfttt.!!! en el cero

No le puedo decir nada más por el momento. Aunque hay algunas informaciones que debo fragmentar por indicaciones también de mi jefe.
Lo que es seguro y se comenta, no sé a qué atenerme, es que en breve le van a practicar de nuevo otra operación quirúrgica, aunque dicen esta vez será algo más rápida y con una ligera incisión por el lagrimal del ojo bueno. ¿Qué será eso? La intervención está prevista para el próximo lunes día 13 del corriente. Dígame algo si se entera.


Seguiremos en contacto.

Le dejo, que tengo un guanaco en el horno.

Saludos Cordiales.
Zoroastra Perarnau Gil.
Desde un lugar de Neuquén-Argentina

Alfonso Muñoz dijo...

Apreciada Zori (permitame la confianza si tenemos que relacionarnos
amenudo), aquí Cóndor (autentico jamón ibérico, no lo dude).

Literalmente me ha dejado con la boca abierta.
No sabía que el selor Figo manejase tantos alias. ¿Es posible que en
alguna ocasión confundiese uno por otro con la consiguiente merma de
credibilidad?
Ahora me explico mucho mejor su sospechosa tendencia, lo digo si ánimo
de crítica, a la introversión y la ezquizofrenia paranoide.
Aunque en mi opinón, he de decirle que con la profesión que ha
desempeñado, lo de menos es llamarse de una u otra manera.
Es habitual, en éste campo de las relaciones sociales impuestas,
intentar pasar desapercibido o hacerse invisible en determinados
momentos. En mi caso suelo desaparecer en la barra del bar donde
intento, a veces durante 20 minutos, pedir un café con leche.
Sabiamente en la espera y abusando de mi circunstancia transparente
observo el devenir de la camarera puesta en carnes. Espero querida
Zori no escandalizarla.

Leches aparte, como no citar a un gran poeta salmantino, Juan Pérez
que dejó escrito en su obra póstuma " La indiosincracia de la perra" y
refiriendose sin duda a su suegra; "Ni estamos locos ni sabemos lo que
queremos". Sin duda el selor Figo, está contenido en esa frase que de
haberlo sabido el poeta, le hubiese dedicado, acompañandola de un
clavel reventón.

Muchas son las preguntas que brotarían de mi boca si supiera
formularlas correctamente en tan exiguo espacio de hostil teclado.
Sin duda usted, tendrá algunas respuestas y otras, tal vez como yo,
las busque en internet, quizás en páginas no recomendables, pero ha de
contestarme a una urgentemente.¿estoy en peligro?
La familia de Nemesia y los tentáculos de sus asesores, ¿conocen de mi
existencia?,¿ del diario de Molly? ¿saben de nuestras correrías por
los bajos fondos de Vitoria y de los demás paisajes?
En definitiva y resumiendo ¿ He de salir por patas,como usted?. Le
ruego me informe lo antes posible, mientras tanto me ocultaré en la
nevera de la roulotte.

Es dificil para mí expresar mi pesar por la situación del señor
Atahualpa, alias todolodemasabajo, pero si tiene usted ocasión, hágale
llegar mi solidaridad y mi apoyo. Le enviaría 20 euros, pero no los
tengo, así que...
Dígale que si necesita un plan de fuga, o contactos para comprar
tabaco en el interior de su reclusión, que no dude en contactarme por
los medios habituales y haré lo imposible por solventar el problema,
expeditivamente y con la mayor discreción. Piense que contamos con
personal de enfermería altamente especializado, infiltrado en varios
hospitales del ICS, pendientes de que chasquee los dedos.
Hágale llegar una sonrisa, el lo entenderá.

Solamente me queda, querída, ponerme también, como no, a su entera
disposición. No dude en contactar conmigo para solucionar cualquier
cuestión, incluso le puedo hacer un presupuesto de reforma de baño...
Lo que quiera, Zori. De verdad.
Muy buenas noches.
Cóndor

rideel dijo...

Apreciado Señor Cóndor:

Gracias ante todo por su comunicación y sus palabras. Puede usted llamarme como quiera, y cuando quiera, faltaría más, pues estas cosas la hacen a una sentirse acompañada, y ajena a su soledad intestina más solitaria.
Comprendo lo que me dice en su mensaje pero no en su totalidad, cosa que se me escapa y que no se dónde va a parar, pues la jerga de los agentes secretos nunca ha sido mi fuerte y sé por mi jefe que sus razones tendrán.
Cómo creo que usted ha pasado la prueba que Atahualpa me impuso como frenillo al tema, y sospecho que para ustedes dos la comunicación directa será más fructífera, le redirecciono (huy ¡qué palabra!) el mensaje que él mismo quiere que le haga llegar.
Me ha venido por fax esta misma mañana, supongo que la habrá enviado cuando ha podido, con el lío que tiene, y yo no me aclaro con esto del cambio horario y no hay mal que por bien no venga.

Verá, como le dije, todo forma parte de sus estrategias y estratagemas más rebuscadas, y aún a riesgo de su persona, sigue en el caso de Nemesia, más por tozudez que por otra cosa, y porque cree que hay más pasta, o eso dice él, de la que en un principio nos críamos. Algo de chamba ha tenido,y más que le va a hacer falta, pero eso es otra historia.

Contacte de nuevo por este medio y veré de que entre ustedes la cosa circule con normalidad.

Salud.

Zoroastra Perarnau Gil. (Zori)
Desde una perdida zona del Cono sur.


<< Antediluviano amigo Cóndor: (Vive la vida igual que si fuera un sueño, pero que nunca termina…)

Aquí Rideel:

Ya daría usted por perdida mi comunicación a tenor de lo que habrá podido leer en alguno de los partes médicos que sobre mi salud se hacen públicamente, como si uno fuera un dictador más en los últimos estertores ¡Caramba! Nada más inexacto ni impróvido.
Mi salud goza de buena salud, concatenándose en mí mismo con otros órganos y vísceras, proporcionándome, no obstante, de forma simultánea y de cara al público el aspecto de gilipollas y buena persona que muestro actualmente (ante no) mientras que en mi interior noto el palpitar de un tigre que es en definitiva lo que soy.
Aplaudo, no obstante y gracias al altísimo, su iniciativa de volver a contactar de una manera que no creería ni aunque lo viera por duplicado, pues llevo meses esperando este mensaje suyo para desencadenar a continuación el movimiento excéntrico de mis engranajes oxidados (llevo demasiado tiempo en el dique a ralentí) y para que conozca lo que luego le diré y que después comprenderá.
Intuyo que la inquietud se hará callo en su persona cuando le haga partícipe del monto de mis duelos y mis quebrantos, no sin mencionarle del mismo modo otras docenas de cosas que serán las que harán con ello complemento.
Antes de proseguir, y por otra parte, le ruego encarecidamente que no sufra usted por mi persona ahora, ni luego, ni nunca, es más, se lo ordeno: no podría perdonarme tal cosa, siendo como es todo una farsa. Ya le informaré sobre lo qué ha sucedido en realidad, no se apure.

Verá:

En ese periodo intermedio entre su último mensaje y mi respuesta, han concurrido sobre mí circunstancias contradictorias y paradójicas de las que habrá tenido conocimiento a través de mi secretaria Zori (secuestros, hospitales, torturas del Santo Oficio, incapacitación mental, indigencia, pupilajes, tutelajes etc.) y aún siendo esta chica un poco parca en palabras, repetitiva a veces, crédula, laboriosa, asincrónica, voluptuosa, aunque extremadamente eficaz, me consta que le ha tenido al corriente, como decía, de mis actuales y no menos actualizadas peripecias (Hoy la he llamado por conferencia intercontinental a la palindrómica y argentina provincia de Neuquén y me ha explicado lo de sus últimas intervenciones).

Comprendo que esta sarta homérica de adversidades habrán labrado en su alma de leopardo montañas de cuitas y desasosiegos y querrá usted intervenir en esta situación si más demora, como amigo, o como buen correligionario generacional que es, o haciendo pago a su desaforado ímpetu campeador, o vaya uno a saber por qué. No lo haga por el momento ya que es cierto que usted corre peligro, como pregunta, pero un peligro relativo, difuso, difractado, si puede llamarse así, silente o de miranda, ya sabe, los mirones de piedra, así que disimule y no haga otra cosa que seguir como está, vida normal y tal y cual, aunque si tiene posibles cómprese un hierro, si no lo tiene, ya me entiende (en el buen sentido, o en el estricto).

Ahora permítame que le endilgue el cuajo de mi oratoria convertido en hormiguitas negras de ordenador.

Para comenzar a desplegarle a usted (también en el buen sentido) la suma de las absurdas circunstancias que me han transportado a tantos y tan desquiciados escenarios y comprenda mejor las cosas que me han llevado a esos lugares, pondré en su conocimiento que anduve allá por el mes de Marzo último ¡Jolín cómo pasa el tiempo! indagando en algunas cuestiones relacionadas con nuestro caso en el cuadrángulo comprendido entre Vitoria, Zugarramurdi, Logroño y, Dios me asita, en el burgalés Condado de Treviño.
De aquellos poco equidistantes lugares, bellos algunos, curiosos otros y, por qué no decirlo, tristes, lúgubres y terroríficos otros, obtuve muchas y muy grandes revelaciones y no pocas y menores satisfacciones. Pareados y remembranzas aparte, y con la intención de complicarle a usted un tanto la vida y un poco más en el caso, le comunicaré parte de lo allí descubierto (creo haberle hecho referencia de mi contacto castrense y de sus segundos y terceros contactos en orden decreciente en lo social, allá por Vitoria: bares de carreteras secundarias, asilos, estaciones de ferrocarril etc.) además de manifestarle que tras algunas referencias obtenidas en lugares poco recomendables, llegué a entrevistarme con la tercera pata de la terna de ancianas investigadoras “la Cúpula Celeste” substrato último de lo que otrora fuera el grupo ufológico Horizontes protuberantes, Prospecciones Celestes y, con anterioridad, el también palindrómico grupo “El birrete Terrible”.
Como usted recordará con total seguridad, las miembras (curioso neologismo neoministerial) de este club esotérico hasta entonces conocidas por nosotros eran, o han sido, la perínclita Nemesia y su íntima y confidente María del Roser Sousa. Me cuesta un isótopo o Potosí hablar de este tema, pero continuaré. La tercera anciana, de la que hasta el momento solamente teníamos referencia a través de su libro “La Odisea cotidiana en el Bingo” María de la vid Montoya, ha resultado ser la que faltaba además de la más activa y creativa (en su particular baremo) de esta especie de Trinca cuaternaria.
Esta persona, aunque apartada y recogida cual eremita anacoreta en un diminuto quiosco que a modo de santuario ella misma se construyó en el nada recomendable lugar conocido como Ochate, pueblo abandonado lleno de las energías más contrapuestas (por llamarlas de alguna manera), maneja y administra (la señora) el compendio de datos y sabidurías más absoluto que parapsicología ibérica alguna pueda abastar.

Bien. Sin ánimo de entrar en mayores definiciones por el momento, le diré que fue allí donde realicé la entrevista que le he comentado y de la que ya le hice algún apunte con anterioridad, llegando yo de madrugada tras perderme por aquellos falsos caminos con el twingo de alquiler y en plena tormenta, encontrándome a la anciana señora María de la vid en medio del camino con los brazos en jarras y con un candil esperándome a enagua calada como una Spéncera Tracey cualquiera en película marinera de Capitanas Intrépidas.
Ante tan inesperada visión, que de por serlo se vio acompañada por un no menos intempestivo y luminoso relámpago con su trueno correspondiente, casi me lo hago encima, para a continuación ver como la chorreante señora se presentaba a sí misma y me comunicaba que hacía dos horas que me estaba esperando y que lo había visto en las cartas.
Resumiendo. La entrevista fue fructífera en lo conceptual, sin querer extenderme en lo mucho conocido de esta señora y de sus contactos nigrománticos, la mayoría, sin comentar los luciféricos o los radiestésicos, cartománticos, quirománticos, esferománticos entre otros, interpretándolos yo (a raíz de ver lo que vi, que lo vi, lo juro) como fruto de mi periodo de abstinencia o de las alucinaciones que a veces observo desde mi persona como si me viera a mí mismo desde dentro de un espejo de aquellos que hay en el parque de atracciones del Tibidabo.
De lo allí observado, sentido y conocido de la mano de la comentada señora Montoya, extrasensorial o raro si se quiere, hará falta que le diga que he llegado a convencerme, no me pregunte por qué, de que en este lugar de la península, en este epicentro cámbrico o geológico, puerta del abismo o de lo desconocido, es donde se responden absolutamente a todas y cada una de las preguntas apremiantes que a uno le abordan en situaciones imprevistas, o como fruto de muchas dudas y desconsuelos, que también puede ser el caso, las mismas preguntas de ahora y de siempre, preguntas imprescindible para el desarrollo de la humanidad y para el de la nómina del Parnaso, para lo dicotómico que resulta ser un currante mileurista y para lo lucido que queda uno al formar parte de los dioses del Olimpo.

Preguntas, preguntas, preguntas.

Siendo las mías muchas al respecto del caso que nos ocupó y nos ocupa, e ignorando otras centenas que me acuciaban por aquel entonces en lo personal, vine a realizarlas apoyado en el brocal de un pozo negro, cosa a la que se avino la astróloga por ser como era antigua socia y afín en fines y cometidos con nuestra nunca bien tildada Nemesia, haciéndolo a renglón seguido tras unas invocaciones y unos rezos en lemosín que llenaron el pozo de alaridos, ecos y sinalefas.

De lo allí admirado, visto y revelado cupieron destacar infinidad de cosas pero sobre todo dos (2) cuestiones.
La primera se hizo noticia retroalimentando la certidumbre que certificaba que Nemesia seguía con vida en ese mes de Marzo, desarrollándola con su particular normalidad en la ciudad autónoma de Ceuta, a saber por qué, viviendo en una caravana pintada de verde y con once gitanos y una cabra.
La segunda, y aún más intrigante (si cabe) resultó ser que el doctor Lucio Anneo Lamela Smith ha estado todo el tiempo al corriente de la situación y el estado de Nemesia siendo cómplice de su desaparición al margen de que sepamos, supongamos, o nos importe un huevo por qué narices se ha comportado así.

No quiero por ahora extenderme más en elucubraciones propias y ajenas.

Me despedí de la anciana María de la vid para ahondar en mi calidoscopio y para no verla jamás, no sin antes pasar la jornada más desoladora de mi existencia (y mire quién lo dice) y la velada más lujuriosa que hombre alguno haya disfrutado acudiendo a aquelarres, orgías y bacanales baturras todos los sábados que no hay fútbol de su vida.

Lo demás se lo podría usted figurar. Intenté contactar directamente con José María Van-Gaal Susaeta y su esposa y prima nieta de Nemesia: Galatea Morató, ambos contribuyentes de este que le cuenta y mecenas de mí despacho durante lo que duró abiertamente el caso de Nemesia, y con la intención de comunicarles mis avances y desenmascarar de una vez por todas al Doctor Lucio Anneo.
Lamentablemente, algo se interpuso en mi camino en forma de vermouth emponzoñado por todo tipo de drogas por la mano del doctor, conduciéndome ese cóctel a una clínica hospitalaria y al desaguisado que la providencia ha hecho barbacoa en mi persona.

Pero, ¡ah!, de lo que podría haberse convertido (que de hecho así fue de alguna manera) en el final de mis días como investigador privado o como ser humano en el sentido más estricto de la expresión, surgió otra mano, esta vez amiga, en el momento justo en que iban a darme la puntilla.
La doctora en psiquiatría por la universidad de Tegucigalpa Susana Górriz, sobrina de la que años atrás fuera doctora en psiquiatría por la universidad de La Laguna: Susana Górriz, tía de la anterior Susana Górriz y que a la vez es familiar suya y amiga impenitente de nuestra amiga Nemesia, quizás sospechando algo de la actitud vampírica y pterodáctila del Doctor Lucio Anneo, y una vez dentro del quirófano, me practicó la incisión pero NO la lobotomía programada, o eso asegura, despertándome ella después en primera persona para explicarme algo que sin duda a usted también le interesará y que le explicaré en otro momento, ya que me llaman por el interfono y debo dar presencia de mí mismo con la cara de buena persona, ya comentada, que pongo las últimas semanas.
De mi divorcio, embargos, progroms, vaciado de cuentas, quema de libros y archivos, juicios etc. ya le hablaré en otro momento, no lo dude.

Esperando que con mis palabras haya podido afinar un poco su desconcierto y que no dude que este que le escribe soy yo y que no estoy lelo, mientras que rogándole no haga pública esta carta aunque la vaya usted a ver en el blog que ahora administra mi querida Zori, admita mi fraternal abrazo.


Hasta luego.
Rideel.

P.D.
Preciso y me urgen más datos del enganche Molly Malone, en concreto de Muy Malone. Adelante.>>

Alfonso Muñoz dijo...

Incombustible e ininflamable Rideel.(...y los sueños, sueños son) Aquí Cóndor.
A tenor de lo que me cuenta,descanso.
En el descansillo de mi conciencia, me siento a releer su sabroso y consistente texto o sopa de la abuela. Sorbo y entrecierro los ojos para contemplar mas intensamente la realidad concéntrica y porque los vapores los ciega. Me relamo y recreo en cada cucharada de éste caldo de letras que tan magistralmente ha ordenado para mí y procuro poco a poco desentrañar su consistencia, inventariar sus ingredientes y especular con sus proporciones. ¡qué buena sopa hace usted papito!.

Realmente me tenía usted preocupado Rideel pensando como pensaba que su situación física y mental no iban a tener retroceso.
!Qué júbilo!!qué alborozo!!que alegría sin par!comprobar que una vez mas, tal vez accidentalmente o tal vez no, se ha salido usted con la suya. Por ello le felicito y le convidaré a un vermout con una tapa de anchoas, si se tercia la ocasión y si tiene usted la tensión en condiciones de revista.

Sorprendente el hallazgo que me relata. La certidumbre de que Nemesia todavía vive, aunque por lo que se desprende de su relato, en precaria situación económica y personal. ¿Sabe usted si la cabra está emparentada con la mascota de la legión?.
Supongo que su estratégia actual, no le permite comprobar in situ, la veracidad del dato, tan teluricamente conseguido y por el momento prefiere usted no arriesgar esta última baza. ¿teme usted una estampida o pefiere descubrir las razones últimas del comportamiento de Nemesia y de sus complices si los hubiera?

Sea como fuere, mantengame informado. Estare expectante a cualquier movimiento en ese o en cualquier otro sentido.

En correo privado, le remito un inventario de los objetos que tomé prestados de la casa-museo de Molly, bajo mi custodia actualmente.

Un abrazo en el reencuentro. Cóndor

rideel dijo...

Muy señor mío Cóndor:

Le tramito el nuevo mensaje de mi jefe para que usted lo valore en su totalidad y como a usted le venga en Ghana.
Hoy el cono sur esta que se sale, y voy a darme una vuelta.
Me comenta Atahualpa que se le ha olvidado preguntarle si ha recibido alguna molestia por parte de la pareja de baile o de los cuatro matones búlgaros.

Un saludo desde Argentona.

Zori.


<< Apreciado Cóndor: (Lo casual debe tener un límite y lo casuístico un fin)

La intención de este nuevo mensaje es la de hacerle saber algunas cosas de mayor enjundia en comparación con las hasta ahora referidas, compendios cuasi enciclopédicos que sin duda le proporcionarán informaciones precisas y concisas, o no, para conocer más del tema, crecer en conocimientos, menguar en ignorancias y consustanciarlo todo con sus propias y personales cavilaciones.

Verá: me hallo en este momento en la consulta de la nunca bien adjetivada doctora Górriz (tenía visita hoy lunes 13, si es que alguien no ha metido la pata en el calendario), pasando un supuesto chequeo ambulatorio, pues dos de sus más enconados jefes y colaboradores (Doctores Güiber y Sirgon) no cesan de realizar docenas de propuestas clínicas e incluso médicas alrededor de mi estado mental, aduciendo con impositivos designios, según comentan, decenas de absurdos argumentos además de la pretensión de seguir con eso de hurgarme debajo de la corteza craneal y ver si consiguen desprenderme no sé qué lóbulos encefálicos.
Cómo me huelo que la cosa puede pasar a mayores y los cuatro matones de baloncesto que la Familia Van-Gaal Morató ha colocado a mi indisposición no cejan ni por un momento de marcar todos y cada uno de mis actos (automáticos algunos), pues aquí que me veo, en el ordenador del despacho de la doctora transmitiéndole a Zori estas letras para que luego ella misma se las haga llegar a usted. Afortunadamente, los gorilas que llevo colgando de la americana están en el pasillo, es la única manera que tengo de driblarlos.

Le recordaré que la La doctora Górriz fue el alma bendita aquella que en el momento más acuciante de mi extensa vida me salió al paso, bisturí electrónico en mano, para negarse a realizarme la lobotomía propuesta por el inefable doctor Lucio Anneo y el poco mencionado sobrino de Roser Sousa, Patxi Forlán Sousa, componentes ambos de una pareja de hecho desde hace poco, y matrimonio de dos maridos en breve según se comenta por los lavaderos y pescaderías de este querido barrio nuestro.
Perdone, pero es que me lío. A lo qué íbamos. Cómo ya la comenté en anterior mensaje, la hermosísima doctora Susana Górriz resulta ser la sobrina de la otra Susana Górriz, también doctora en psiquiatría, y a la vez psicoanalista de Nemesia mientras que, y verá que curioso, clienta de Nemesia en el asunto aquel del Tarot y de las cartas., cosa que me ha permitido conocer algunas facetas ignoradas de las ancianas señoras (de esas en concreto) a la vez que comprender muchas más cosas.

Saltándome lo de la tía esta, le diré que en el infame trance de la intervención quirúrgica, y como comprenderá lo digo sin resquemores, hice acopio de muchas y muy variadas casualidades y coincidencias aliándose mientras en pos de mi longevidad, favoreciendo al mismo tiempo que en la cuenta atrás del cloroformo yo mencionara por su nombre y por mi cuenta a nuestra querida Nemesia, y que la doctora tuviera del mismo modo noticia de ella a través de mis palabras y por las pronunciadas con anterioridad por la otra doctora Górriz, su tía, circunstancia que la condujo a elaborar un complejo logaritmo en su mente analítica llegando a la conclusión que yo era yo mismo, y reconociéndome como el investigador privado que andaba en la búsqueda de aquella anciana amiga de la familia. La chiripa no es uno de mis fuertes, así que cogí un canto y me di en los dientes.

Fue que a continuación y mientras tanto, viendo la Susi (La Górriz) detrás de aquellos dos intrigantes bujarrones (L.Anneo, Patxi), entiéndase en el buen sentido, que sus maneras, pucheritos, exigencias y rabietas eran del todo desmesuradas y que hasta entonces (todo el verano) y de la misma manera habían hecho hincapié en mantenerme atado al camastro con un cachirulo tapándome la boca y un camisón tapándome otras cosas, que la inefable facultativa cocinara en su perola toda una serie de elucubrativas sospechas, recelos y desconfianzas, alrededor del hecho luctuoso de operar a un pobre hombre, quizás no tanto, al que pretendían convertir en un mueble de tocador o un ladrillo. La cosa mutó indescriptiblemente cuando la Górriz habló por teléfono con la Górriz y entre ambas decidieron que el caso debía derivar hacía la preservación de mis capacidades, por el momento, antes que convertir mis contenidos craneales en papilla gelificada cual pastel pseudo industrial de chóped, cosa que agradecí entonces y agradezco ahora mucho más si cabe.

Para que vea por dónde van los tiros, le diré que entre los tres hemos determinado proseguir con el caso de Nemesia por lo que debo hacerme yo el loco o el tonto, que no es lo mismo, pero es igual, mientras que la doctora describe mi estado en los partes médicos más desquiciados que se puedan imaginar con el camuflado cometido de dejar constancia de mi supuesta castración psicológica y mi paz mental. Al parecer, estos apergaminados palimpsestos no han sido bien comprendidos por sus jefes de departamento, ya que insisten e incluso exhortan a proseguir con los estudios e intervenciones que en mí desarrollan, como le he comentado con anterioridad y usted habrá podido interpretar en mis mensajes.

Bueno, pues eso, que de alguna manera me protegen (las dos Górriz) y entre los tres (las dos Górriz y yo) hemos constituido una gran amistad y un nuevo gabinete de investigación, aunque sin razón social ni valor en el catastro, favoreciendo que nuestras relaciones derroten hacia otros paisajes menos coherentes, si cabe, establecidos en un intercambio personal arrebatado y anatómico, que si a veces con una resulta placentero, por lo de lo discrecional y voluntarioso, con la otra Górriz destaca absolutamente lo contrario. Como hombre de mundo que soy, acudo a estas obligaciones con las embestidas que el azaroso mundo de la alcoba ha hecho en mi enseñanza, tareas cultivadas en lugares tan dispares como los charcos y las barracas del barrio de la Bomba, o en los tálamos regios de princesitas de Pedralbes.
Deslealtades al margen, le diré, amigo Cóndor, que Las Górriz son ambas pulcras y limpias, divertidas, serias, modernas, bienhabladas, deportivas, tolerantes, de todo hay que dejar constancia, y me dejan hacer uso de sus respectivas pertenencias, ordenadores sobre todo, y son estos, no otros, los únicos que tengo ahora para remitirle a usted lo que me acucia, por lo que si algún día fallo en mi epistolario, pues que lo comprenda usted.

No me negará que voy progresando, en mi muy particular grado, aunque me tiemblen un poco las piernas, que eso es todo, pues son las prácticas y ejercicios antes mencionados los que renuevan el interés que tengo en lo que me queda de vida.
Además, como a ninguna de las dos Susanas parece que les importe un carajo lo que hagamos los unos a las espaldas de los otros, prosigo con mi tema abarcando otras cuestiones.

En cuanto al caso de Nemesia, que después de darle a usted tantas referencias de mi momento se me había quedado un tanto al margen la pobre, lamento decirle que se nos ha vuelto a perder sin saber en qué sitio ni cómo, dándola yo otra vez por muerta, y que si bien en aquel mes de Marzo estuvo en Ceuta, según la médium Montoya, ahora jura haberla visto en el pozo y en Fraga (Huesca) cogiendo melocotones.
Debo manifestarle que me es imposible desplazarme a ese lugar, por muy bonito o interesante que sea, ya que como usted sabe me encuentro preso de muchas maneras y de muy diferentes estamentos y personas: La familia de constructores de S’Agaró Van-Gaal Morató, aún a pesar de la crisis; sus cuatro matones búlgaros, la pareja de hecho, la pareja de Górriz… y aun a pesar de todo no me resigno a abandonar el tema. Se ha sabido que los once gitanos ceutíes, cabra incluida, se han abierto cuentas corrientes en diferentes entidades bancarias de España y del Rif y que han incrementado su parque móvil con no menos de tres mercedes, un porche, una OSSA con sidecar, y una escalera de aluminio nueva para la cabra. Nemesia maneja, de eso no hay duda. ¿De dónde saca tanta pasta? Ya lo sabremos, si es que esta Nemesia es la nuestra, claro.
No sé de qué manera ni cómo, ni cuando, a veces ni por qué, pero no me resigno: a esta la encuentro yo y más ahora que hay pasta de por medio.

A continuación me despediré, y espero no haberle aburrido otra vez con esta serie de peroratas de hombre libre aunque instruido, oculto pero invisible, pero es que debo ejercitarme y ponerme a prueba, ya que aunque me aseguran que en la operación no me tocaron un pelo, alguno me tocarían, digo yo, comienzo a no estar muy seguro.

Deseando que para usted la cosa siga teniendo su aquello, agradeciendo que prosiga en un caso como este en primera persona, y viendo, como veo, su interés en este supuesto y nunca comprobado folletín de serie negra, como crece y se estira, se bifurca y se restriñe, participando usted como protagonista y contrapunto sanchopancesco, o biscuterino, o watsoniano, le deseo lo mejor, añadiendo que espero sus mensajes y la punta del hilo del ovillo que guste usted mandarme.

Ya sabe usted aquello de:

Donde rasca la uña entra el dedo, donde entra el dedo la mano y después el brazo entero.

Saludos cordiales.

Atahualpa Figo Moreno:
Rideel. >>

Alfonso Muñoz dijo...

Intermedia Zori (la casualidad no existe). Aquí Cóndor.
Me complace enormemente comprobar que pese a la distancia, la diferencia horaria y el acento patagonio, nuestras comunicaciones pueden discurrir con la fluidez que es deseable en casos de vida o muerte, como talmente el que nos ocupa. Imginese que ante una velada o explícita amenanza, que pudiera o pudiese, producirse, aquí (del Llobregat) o alli (del Chubut), no nos pudieramos comunicar al instante para advertirnos o para quedar a comer. Las consecuencias son claras... Es por ello que le agradezco la información concerniente a la pareja de baile o las de los búlgaros. No me han molestado todavía, pero tomaré mis precauciones y me calzaré mis botas de seguridad con punta de acero, de cuando trabajaba en el puerto,como arma disuasoria o si llega la ocasión como temibles defensas ante agresiones testosterónicas. Tranqulice a Rideel de mi parte y transmitale el mensaje que le adjunto.

Engorrizado Rideel. (la causa de lo casual, es la casa del azar). Aquí Cóndor.

Veo que, lejos de encontrar usted su media naranja, ha encontrado, ya veremos si a su pesar o para goce indefinido,la naranja entera. (Al menos 4 naranjas si se contar)
Bienvenidas ambas Górriz, por la frescura que pueden aportar al caso o por la frescura que pueden aportar en general, dicho sea en un contexto de interés común y sin ánimo de faltar.

Creo que acierta usted en hacerse pasar por lelo, si con ello consigue zafarse de los designios de sus enemigos, que bien pudieran pensar que no merece la pena lobotomizarlo mas y que obrando en buena lógica criminal, vaya poco a poco liberando recursos humanos, en su favor y para desgracia de otras personas. Avíseme si le levantan la vigilancia o si desea que les compre plátanos.

En cuanto a las fuerzas telúricas que le avisan a cada momento de donde se haya la anciana Nemesia, permítame que dude de de su eficacia. No es posible que hoy esté aquí ( del rio que no tiene Ceuta) y mañana allí (del Fraga). Mucho me temo que el GPS de localización de ancianas perdidas por la geografía nacional, no funciona como debiera, sobre todo en el plano astral.

En otros planos, comentarle que una vez superada la crisis de mi memez intrínseca antropomorfa, me dedico en la actualidad a descargar camiones para poco o mucho, ganarme la vida, lo que aveces es la causa de repuntes mas o menos virulentos de mi dolencia, pero que controlo con dosis de buen humor y de aguardiente de orujo. No tengo claro en qué orden.

La cosa por la que usted inquiere, para mí tiene todavía su aquello, aunque lamento que haya días en los que llegar en estado de franco agotamiento físico y mentar, me subleva en la tarea que me he impuesto. Un amigo mío muy fuctuoso, aboga por la "resitencia", no sólo como actitud sino cómo fin último de la existencia social.
No tema, poco a poco. De momento, le he enviado por valija privada, espero que no sea interceptada por nuestro enemigos, el inventario detallado de los objetos encontrados y requisados por el que suscribe, en la Casa-Museo de Molly Malone en Goiains.
Mire usted si alguno le suena y podemos someterlo a la prueba del carbono 14 o algún otro carbono que usted como experto sugiera, que nos fije la verdad, cual película Agfa.
A veces los objetos trascienden de su dueño y adoptan personalidades própias. Miedo me da.

Incluso le he adjuntado una foto de Molly, fechada en el 72 y realizada por otra, de momento desconocida, Marta Mar.

Espero que sus gorridevociones, le dejen el suficiente tiempo libre para establecer sus prioridades. La gonorrea no perdona.
Cóndor.

PD. Si necesita usted ayuda en ése asunto, conozco yo una farmaceutica...

rideel dijo...

Apreciado Agente Cóndor: (Como alcalde vuestro que soy os debo una explicación, y esa explicación que os debo os la voy a dar. (Bardem, Mihura y Berlanga por boca de Pepe Isbert en “Bienvenido Mister Marshall”)

Explicación:

Con humildad infradotada vengo a comunicarle que hace días que ando algo extenuado por mis obligaciones sociales, recuerde lo de mis dos Górriz, cosa que se acrecienta con el exiguo sueldo que me tiene asignado mi tutor Dr. Lucio Anneo Lamela Smith, que Dios tenga en su gloria, a ser posible pronto, ridícula paga que no me da para vitaminas ni para ginseng, ni para E.P.O tercera generación, ni para tabaco, ni gominotas, convergencia que me fuerza a arrastrarme en pos de cocas de llardons que dicen alimentan bastante y te pones como un toro cuando te has comido seis quilos. Estas elípticas circunstancias no me permiten acudir a las bibliotecas tanto como yo quisiera para hacer uso de ordenadores, imprescindibles, todo hay que decirlo, y para que uno prosiga en sus investigaciones y pueda contactar con sus agentes afines y consejeros, usted entre ellos, es por eso por lo que aprovecho y me disculpo por lo espaciados que quedan mis mensajes.
Afortunadamente ahora me veo en la parada de Metro Liceu, aporreando un ordenador con Internet que hay en un despacho muy bonito que aquí han instalado con esto de las reformas (favorecido por haber venido de compras con la pareja de hecho L.A. y P. escapándome yo de ellos cual párvulo juguetón) aprovechando ad latere que el jefe de estación: Sr. Onofre Navas Borreguero resulta ser condiscípulo mío desde mis épocas subterráneas de las que creo haberle hablado. Casualidades, pero a veces hacen falta.

Veré de comenzar de la manera que mejor pueda con lo que quiero comentarle.

En primer lugar, agradecido e ilusionado (o a lo Morgan) por el tan pormenorizado arramble de material de la señora Molly Malone, o la Malone, desgrano las cuentas que nos van a llevar a desembarazarnos de tan intrafísicos desvelos, dudas, incertidumbres, que no por ser propios dejarán de parecer de otro siendo como son suyos y míos.
Toda investigación, amigo mío, y como usted bien sabe, precisa de datos como estos para esclarecer los claroscuros que en ocasiones nos acuden para ver con mayor nitidez y comprender las cosas, contrastándolas en algunas ocasiones con catas, pruebas, centrifugaciones, cultivos, radiografías, endoscopias, esferificaciones ferranadrianas etc. aunque todo a su debido tiempo y con la frialdad, el aguante y el cálculo halconero que nos merezca el asunto. Paciencia, autocontrol, disciplina…
Algunas otras veces, lo sabrá usted por algo que haya sucedido en su vida, hay vicisitudes que se presentan sin que nadie las convoque, causando las consecuencias, devastadoras algunas, que en todo acto circunstancial concurren, aunque la mayoría de las veces no nos demos cuenta ni lo apreciemos con la suficiente correspondencia.
Estos panegíricos ditirambos, quizás debería decir miserias, hacen pendular sobre nuestras cabezas cientos de inconcretas y paradójicas casualidades, facultando del mismo modo que presintamos los resultados sin comprender los caminos y circunvalaciones, mucho menos los cruces y cunetas, que han llevado el tema hasta tan puntuales y vectoriales corolarios.
Disculpe esta pequeña aproximación a la ciencia deductiva esperando no haya causado ningún malestar en su persona, pero se me ha hecho necesaria esta meditación., así, a bote pronto, a matacaballo. Le podría explicar cosas que podrían ver aplicadas en sí mismas estas teorías y que han obrado, como usted bien sabe, en mi persona desde finales del verano y que tienen que ver con mi lamentable estado actual, pero eso de momento no importa, creo tener la sartén por el mango, aunque no haya vuelta de tortilla por el momento.

Pelillos a la mar.

Interesante, he de confesarle por otra parte, su aportación extemporánea del carné de prensa de Mariano Luis Berzoya, antiguo falangista y enemigo enconado de la familia Morató, como usted mismo creo que conoce (si este Berzoya es el Berzoya, claro), acosador empedernido de la viuda Hildegarda desde los primeros e indefinibles años cuarenta hasta los contradictorios y jubilosos años sesenta, temática que embasta sin demasiado entusiasmo Nemesia en “Cuadernos” en el viaje de la Heroína. ¿Cómo habrá llegado ese carné de prensa a Vitoria? ¿Qué relación tiene una cosa con la otra y la otra con la una? ¿Será cierto lo de los riñones?
Ignoro la respuesta a esta terna de cuestiones pero las explicativas pormenorizaciones que surgirán de este marasmo van a favorecer, no le quepa duda, que descubramos qué se fraguó en la honrosa Vitoria, y en qué medidas y dónde desembocó todo ello.
Esta nueva retroalimentación autointerpelada, como le decía, basada en el What, When, Where, How… deberá conducirnos unívoca a los Who & Why, teoremas sintagmáticos y premisas silogísticas que se columpian intermitentes en todo caso detectivesco (refutable cuando usted quiera) cuestiones que me hacen valorar con suficiencia por dónde avanzará el caso, por lo menos estos afluentes, estas ramificaciones y estas fracciones fractales en el argumento que nos ocupa.
La ya explicada consubstanciación (¡vaya palabra!) me hace observar del mismo modo que mi persona crece en erudición y pesquis, hallándose por fin recuperada, o casi, en lo mental y en lo espiritual, no así en lo físico, como creo haber comentado, argucia pinturera que favorece que prosigamos en medida de lo posible y hagamos del ostracismo una cáscara bivalva olvidada en un acantilado cualquiera.

A continuación, no obstante, veré de eslabonar mi mente encadenada con otros soliloquios típicos de personas como yo.

Agradezco también y del mismo modo su siguiente mensaje y sus investigaciones, lamentando de forma obsesiva, si cabe, su momento laboral, desconociendo la vertiente mamposteril y baldosera de usted, dignos empleos, todo sea dicho con el mayor de los respetos, creyéndole yo en otro tiempo periodista versado en reportajes de riesgo, en juzgados, lupanares, empresas de anuncios publicitarios y otras cosas, contenidos en el eco social de inmobiliarias o agencias similares, mientras que de augustos necrológicos y cuestiones de relax.
Nada me perturba más, no crea, que ver como un día usted amartilla teclados en plan taquimeca, para otro descargar muelles o trailers y al poco verse “enracholando” cuartos de baño de viudas, jubilados, pensionistas y/u otras gentes del mal vivir.
Las crisis tienen esto, créame, y me temo que cientos de cosas mejores.
En la medida de lo posible, y en la que yo mismo pudiera, ya vería yo de colaborar en su empresa personal, y si las fuerzas me acompañarán (ya sabe por qué lo digo) ya repararía yo en aguantarle el regle o llenarle las gavetas, o hacerle de contratista o de prestamista, o de peón. En otro estadio de mi vida anduve yo también con escarpas y martillos, sierras, escoplos, macetas (de hierro) y hasta con lanzas térmicas, pero eso es otra historia y ya pagué por ello con mi inactividad y a la sombra. No en vano fui conocido tiempo atrás como Ata el Butronero, muy solicitado allá por los años ochenta, ni se figura, cuando los sótanos de los bancos llegaban a las alcantarillas, como ahora, aunque no solamente en lo conceptual, y en un fin de semana te podías montar en el dólar, como se decía entonces.
Creo haberle hablado de esas épocas con otros correos, si no es así, ruego me disculpe.

En cuanto a su postrero mensaje, el referido a la bodega hospitalense, no acierto a comprender qué motivo ha tenido Zori para publicar esta foto, ya que le había comentado a ella con anterioridad que se trata de una pista un tanto falsa, al haber investigado yo mismo en ese lugar no habiendo podio extraer conclusión alguna de nada, a excepción de muchos dolores de cabeza provocados por el vermouth a granel que allí sirven, y aunque aseguran que es el auténtico Izaguirre, esas cefaleas me evocan mis impenitentes años de peregrinaje de garrafa en garrafa a la búsqueda de un tapón irrellenable auténtico.

Aprovecho el tono y el contenido que está tomando esta epistolilla para adjuntar a modo de eje de simetría o bisectriz un nuevo plano (consuetudinario) donde se plasma el modus operandi de este agente que es en definitiva quien le cuenta. Yo también anduve revolviendo cajas y cajones en el apartamento de Nemesia., montañas enteras, y aún retengo en mi memoria insomne lo que de allí obtuve, a pesar de que me lo hayan hecho desaparecer estos cabrones. Aquí se lo detallo.

Un trozo de tiza pequeño.
Dos chapas de cinzano oxidadas, azul y roja.
Un pollito de la Mona.
Un amuleto en forma de Donut hecho con corteza de pino con las letras MSP y R
Un anillo de plata con forma de serpiente.
Una pajarita de papel
Un billete de RENFE color amarillo 21 de Marzo de 1982
Un cordel rojo de pastelería
Un paquete de Ducados con seis cigarros carcomidos.
Una pequeña bolsa de arena.
Una ficha telefónica.
Un bolígrafo Inoxcrom.
Un posturón de Henna.
Una chapa de OTAN NO.
Una foto de E.T. el extraterrestre.
Una foto de Joe Rígoli (dedicada a Lucio con amor)
Un recorte de prensa del Noticiero Universal “Ocaña, retrato intermitente”
Un recorte de prensa de la Hoja del Lunes con “El Avistamiento de La Font Freda, Berga”
Un recorte de prensa del Correo Catalán “Quini ha sido liberado”
Un carné militar de Francisco Forlán Sousa (Patxi) Regimiento de Infantería Acorazada "Alcázar de Toledo" nº 61. Cocinero.
Una hoja prensada de Marihuana.
Una Foto de Eduardo Benavente.
Veinticuatro tapones de wisky Cardhu.
Monedas y billetes africanos.
Acciones de empresas africanas.
Dos Condones caducados de la antigua marca “Mandinga” XXXL
Una púa de guitarra.
Una cejilla de guitarra.
Un cancionero “Cançons catalanes” para guitarra
Una entrada al cine Estadium (Hospitalet)
Cuatro cartas desde Badajoz. Agosto 1979. (Letra de chica)
Una cuchilla de afeitar marca La Palmera.
Un poema transcrito a mano de Leopoldo María Panero.
Una foto de Jimmy Hendricks.
Una foto de Cruyff
Una foto de Gaby, Fofó, Miliky y fofito. Fofito tiene garabateadas dos orejas de burro.
Una receta de bacalao al ajo arriero escrita a mano.
Una receta de bacalao Brass.
Una receta de bacalao, en concreto Tripes amb Pessols.
Un beso de carmín en un billete de veinte duros.
Un póster de la revista LIB. Susana Estrada y el robot.
Un carnet del Instituto de Bellvitge (Hospitalet) 1977.

Ya ve usted qué cosas.

En cuanto a lo de Nemesia, que siempre se me queda para el final, habrá usted podido observar (en el blog) que Zori ha publicado dos textos interceptados por mí (mi trabajo me ha costado hacérselos llegar) cuyo destinatario era el Doctor Lucio Anneo, y por ende Patxi. Nada que comentar al respecto, a no ser que uno interprete esos mensajes como si fueran el cordón umbilical que mantiene a Nemesia atada al mundo de los vivos, entiéndase vivos como “vivillos”, los espabilados estos de Lucio y Patxi, que de una manera u otra siguen manteniendo contacto con Nemesia y saben de sus más que posibles correrías.
El primer mensaje da fe de que estuvo en Ceuta, de allí proviene, y el segundo, más misterioso, si cabe, proviene de Fraga (Huesca) donde parece estar recluida en algún sitio, quizás un asilo o una clínica o una fundación o vaya usted a saber qué, cosas que corroboran nuestras sospechas de que la anciana sigue con vida, si eso es vida, y certifica las últimas informaciones aportadas por la médium ermitaña María de la Vid Montoya.

Por lo demás, y como cantaba aquel, la vida sigue igual, desarrollándose con su particular progresión hacia delante, cosa que me recuerda, espero que me disculpe él este pequeño plagio, un texto del propio Dr. Lucio Anneo en su novela “La reina de Las croquetas y un señor de la Barceloneta”

<<-¡A ver qué más nos puede pasar! –Dijo de pronto llenando al futuro de crueles e inmerecidas incertidumbres. Este futuro, en concreto, aún no nos había faltado en nada, aunque de hecho, y en su hipotética existencia, ya sostenía las imprevisibles alforjas de nuestro devenir insondable.>>

Estoy a un tris de dar con algo de mayor calibre, si cabe, aportación que tienen que valorar de nuevo las dos Górriz, si las fuerzas me acompañan

No dude en contactar por cualquier cuestión.

Reciba de nuevo un genuflexo rodillazo (a tierra)…en sus marcas, listos, ya, prietas las filas, firmes, severidad espartanos, flagelación franciscanos, lobotomía americanos, Amén.

Atahualpa Figo Moreno.
Rideel.

EL EQUIPO DE RIDEEL &CO. PRECISA DE SU COLABORACIÓN

Cualquier noticia, o aproximación a la identidad de doña Nemesia Morató Xirgu, será bien recibida.
Sus posibles herederos sabrán agradecérselo.
Se ha establecido una recompensa de la que se dará mayor información en su momento.
A todo aquel que sepa dar algún dato sobre Nemesia o esclarecer las relaciones que gota a gota van desgranándose a través de este medio, la familia Van-Gaal Morató ofrecerá su merecida compensación.

(Muy importante: Necesitamos fotografías de la señora Morató de la que se pudiera disponer, ya que, incomprensiblemente, a día de hoy no contamos con ninguna. De manera un tanto ilógica, han desaparecido inclusive del registro del Documento nacional de identidad.)

Escrito atribuido a la señora N.Morató. Cajón de una mesilla, Chamarilero, Ponferrada, 19/08/04.




Me siento abotargada, y creo que no es por otra causa que por la costumbre que estoy adquiriendo de hacer balance de todos y cada uno de mis actos. A pesar de ello, valoro como positivo este antojo mío de juzgar cualquier cosa, aunque tenga que verme como me veo y sentirme de esta manera. Podrá parecer que todo viene derivado desde el cono de deyección de mi cascada natural de persona uniforme y objetiva, no carente de pesimismos profundos ni ausente de las más elementales virtudes teologales, cardinales, dones y frutos del espíritu.Disiento, no obstante, mientras que me reafirmo en lo mío, sin dejar de calificar esta manía persecutoria como fruto escuálido de una moralidad impuesta, a la vez que la veo desde lejos con la rigidez de aquella que ha sido educada dentro de camisas de franela y de batas escolares dos tallas menores. Es por esto, y por algunas otras cuestiones, que he decidido calificar mi aproximación al sintagma gramatical “Resentimiento” como el delta lógico de una vida fútil e inservible, afluente, a la vez, de vidas principales y rierilla de un acueducto-gravamen de progenitores impositivos y totalitarios, mientras que de puentes desorientados y ausentes. De nada sirvieron las revisiones periódicas de mis expedientes realizadas con inquina zorruna por las hermanas (mitad a madres mitad monjas) de la fluida congregación de Santa Brunilda. De nada sirvieron, digo, pero me reafirmo en la naturalidad que, años después, he podido valorar en sus plegarias. Si bien papá y mamá me ignoraron todo lo que pudieron, mientras viajaban por los países más recónditos a la búsqueda de objetos arqueológicos relacionados con el germen de vida extraterrestre en nuestro planeta (cosa que no viene a cuento en este resumen), ellos mismos hicieron que otros estamentos instructivos, y por qué no decirlo: docentes, se cebaran con mi persona (y experimentaran con ella) haciendo uso del catálogo de las técnicas pedagógicas misioneras más avanzadas, mientras que desempolvaban algunas otras tardo-medievales. He de reconocer, por otra parte, haciendo de nuevo alarde de mi obcecación y manía de ser la jueza de mi vida, que si bien la voluntad de las misioneras y voluntarias fue siempre la de orientarme hacia la sumisión y el recato, mi tozudez opuso a sus prácticas una férrea resistencia a la vez que una inoperancia y un sufrimiento sin medida. Esa negación a dejarme llevar sin sentido, “Impermeable Mula” me llamó Sor Társila, facultó que me dieran por imposible a la vez que me ofrecieran como alternativa una serie de ocupaciones relacionadas con la limpieza de las letrinas, las jaulas de las pulardas y el laboratorio de química. Fue ahí donde purgué mis pecados de alumna indisciplinada y obtusa, según ellas, a la vez que yo misma ejercía de profesora mía, mientras que de compañera, colega y amiga invisible. La cuestión es que el paso del tiempo, y el uso abusivo de determinadas substancias, me ha hecho olvidar el monto de aquellos infaustos años de aprendizaje y clausura, mientras que, incomprensiblemente, ha acrecentado esta indiscriminada inclinación mía hacia el Resentimiento. Lo porcentual de lo uno nos lleva a lo otro y viceversa, mientras que es directamente proporcional, el incremento del sentimiento puro este, al declive memorístico que de lo concreto y vivido recuerdo.Lo que no he dejado ni por un momento de chirriar como el eje vertebrador de mi estúpida infancia, ha sido la vara de mimbre con la que Sor Társila intentaba en todo momento hacerme comprender, también según ella, la verdad que había en sus palabras y en lo mucho que mi mente oxidada desconocía del mundo exterior. La tarde en que desapareció dentro de la tina de ácido sulfúrico fue la más feliz de mi vida, al margen, claro está, de la que vi aterrizar a papá y a mamá en un platillo volante con aspecto de taxi para rescatarme y partir todos juntos hacia el asteroide imaginario QWERTY, aunque después me abandonaran allí a merced de otras alienígenas también con túnicas y proclives sin mesura a innumerables ritos y ceremoniales relacionados con rezos y guisos de remolachas hervidas.Volviendo a lo incongruente de mi vida vivida, no podré olvidar mi tránsito por hospicios, lupanares, estaciones orbitales ni cotolengos. Resultaría ahora conveniente hacer uso de una capacidad de valoración superior de la que dispongo, como para poder transmitir al lector cuales fueron y de qué manera obraron en mi persona aquellos periplos sin límite por biohábitats tan dispares. Si pudiera endilgarles mejor mi condición narrativa, explicaría de qué manera y cómo huí, caí presa, realicé conferencias, fui asistente teatral e incluso hice un curso de cocina japonesa. No quisiera evaluar este compendio de excentricidades lúdicas como el lógico flujo magmático y purulento en el que ha desembocado mi existencia. No.No muero aquí, aunque muchos lo quisieran; mi vida debe avanzar progresando hacia adelante, mientras que observo el modo en que yo misma me retracto de mis críticas a la vez que me reafirmo en mis valoraciones. Salgo a comprarme unas medias.